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Hace unos dias, el presidente estadounidense Donald Trump, envió un mensaje certero al mundo, anunciando que él podrá cortar la ayuda de Estados Unidos a los países que voten en la ONU una resolución condenando el reconocimiento de Jerusalén como la capital de Israel.
En un comunicado elaborado en la Casa Blanca, Donald Trump advirtió: “todas estas naciones toman nuestro dinero, y luego votan contra nosotros. Estaremos observando estos votos. Deja que voten contra nosotros, vamos a ahorrar miles de millones “. Esto incluye a Brasil, que está siendo sistemáticamente en contra de Israel.
Los 193 países que conforman la Asamblea General de la ONU se reunió ayer para tratar sobre Jerusalén. El fin de esta cumbre sería mostrar que EEUU e Israel están solos, pero ningún país tiene derecho de veto en esta reunión.
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Mientras se realizaba la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, a principios de esta semana, Washington realizó su derecho de veto luego de los demás países votaran para que Estados Unidos cancelara el reconocimiento de Jerusalén y darle todos los derechos a los palestinos.
El presidente Trump, reiteró lo que dijo el martes, Nikki Haley, en la Embajadora de Estados Unidos en las Naciones Unidas, advirtió que sus votos serían observados atentamente por Estados Unidos. Remarcó que ningún otro país podría decirles dónde los estadounidenses deberían colocar su embajada.
El accionar estadounidense fue visto como una medición de fuerza diplomática, sobre todo contra los países islámicos. Liderados por el presidente de Turquía, quien anunció que harán un esfuerzo para que los palestinos tengan un Estado reconocido por la ONU, lo que forzará una posición oficial sobre la capital.
La fuerte postura de los Estados Unidos puede resultar en sanciones a quienes queden contra Israel. Luego de que el presidente Trump decidió en octubre de la salida de su país de la UNESCO , que estaban acompañados por Israel.
Fuente: Gospelprime
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